miércoles, 7 de octubre de 2015

Desarrollo Humano 3º C Bach

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EMPATÍA

1.1 Los Valores
     Probablemente habrás advertido que en la actualidad se habla de los valores y se les cita exageradamente, sin precisar su noción, sus alcances, sus implicaciones. Se asume un sobreentendido concepto de valor, sin asegurarse de que realmente este bien definido.
     La confusión surge porque algunas personas se dejan llevar por lo que otros dicen, y las corrientes de pensamiento no parten de la realidad para definir el concepto de valor, sino que invierten el proceso: no hace falta explicación alguna.
     Además, encontramos otro hecho que ha reducido la comprensión del tema de los valores, se trata de la importancia que la sociedad da a la economía. Casi automáticamente se tiene una visión economista y a todo se pone un precio: a la persona, al amor, a la amistad, a la vida...todo vale, aunque no necesariamente sea valioso.
     La raíz etimológica de la palabra valor deriva del latín tardío valor, emparentado con la palabra valere que significa ser fuerte, robusto, tener fuerza o poder, prevalecer, tener eficacia.
     Date cuenta de que, tras esta concepción hay un empeño de extraer de la realidad algo que esta dentro: la fuerza, la potencia de un ser. Esta potencia se concreta gracias a la operación humana.
     Sin embargo, muchas veces, esperamos algo de una realidad y no lo obtenemos por desconocer el tipo de valores contenidos en ese determinado ser. Esto podría resumirse en un refrán popular: "no le pidas peras al olmo".
     Cuando alcanzamos lo esperado confirmamos que los valores que habíamos intuido si existen: empezamos a reconocerlos y podemos utilizarlos con seguridad y en forma adecuada.
     Por ejemplo, tu puedes sospechar que para ti es valioso aprender algo sobre la electricidad. Es posible que te decidas a hacerlo y, si tienes aptitudes para esos estudios, la actividad que realices como electricista te reportara beneficios: tal vez logres diseñar una lampara original.
     Quizá tengas una habilidad especial en el manejo de computadoras, pero si nunca te acercas a ellas y ni siquiera te atreves a encenderlas, es posible que jamas descubras en ti ese valor.
     Para desarrollarnos integralmente como personas, necesitábamos ejercitar la inteligencia y voluntad. En el campo de la voluntad es conveniente desarrollar cierta superioridad: el dominio sobre nosotros mismos, que nos permitirá adquirir virtudes, hábitos buenos que integran de ,amera estable nuestro modo de ser.
     Y son los valores los que dan luz a la inteligencia para que pueda guiar a la voluntad. Por eso, los valores se hacen vida cuando adquirimos virtudes. Este es el papel mas importante de los valores.



1.2 La Autoestima
     El conocimiento de los valores puede ayudarte a favorecer tu autoestima, mediante la adquisición de virtudes como la lealtad, la prudencia y la discreción. Y, como los valores están en ti, puedes tener la seguridad de que nunca perderás el fundamento de tu autoestima, aunque tengas problemas que deberás resolver.
     Las personas virtuosas se sienten aceptadas por los demás. Esta aprobación, basadas en la realidad, las impulsos a vivir de manera productiva y creativa.

     Además, la conciencia de nuestro valor personal permite captar con mayor sensibilidad el sentido de nuestra dignidad, en definitiva, intuir el conjunto de valores realizados en nuestra naturaleza.
     Para el pensador y escritor alemán Goethe, la peor desgracia que le puede suceder a un hombre es pensar mal de si mismo.
     Por el contrario, si te das cuenta de que tienes capacidad de aprender, de ayudar a otros, de sentir afecto por tus semejantes, etc,. pensaras bien de tu mismo y tu nivel de autoestima ser alto. Por eso tu autoestima se fortalece cuando reeconoces los valores que están asentados en tu vida.
     Te propongo varios niveles de observación propia que pueden fundamentar tu autoestima:
     Cuando realices tu evaluación podrás empezar a aceptarte a ti mismo tal y como res.
     Se trata de que tu mismo descubras cuales son tus aspectos positivos en los que puedes apoyarte para ser mejor, y cuales son los aspectos negativos que te conviene superar.
     Si logras lo anterior, podrás descubrir tu verdadero lugar y el contexto en el que te desenvuelves, y sabrás para que cosas eres bueno y que te conviene evitar. Entonces te respetaras a ti mismo. Cuando has llegado a conocerte, adquieres la capacidad de expresar y orientar de una manera más adecuada tus sentimientos, tus emociones, tus inclinaciones y tus hallazgos.
     De esta forma toda persona se reconoce con valores y aptitudes positivas. Asì puedes alcanzar la autoestima, que es la síntesis de las etapas anteriores. Esto sucede cuando te conoces, te aceptas, puedes establecer buenas relaciones con los demás, y plantearte metras a las que normalmente seras capaz de llegar. Todo esto incrementa tu energía vital y, ante algún fracaso no te frustraras fácilmente y podrás aprovecharlo como una oportunidad de aprendizaje y experiencia.

Los valores que se refuerzan gracias a tu autoestima son
     En resumen, si fomentas la autoestima estarás mejor dispuesto para desarrollar tu eficacia, seras mas productivo y podrás establecer un mejor trato con los demás.



1.3 La Empatia
     Una vez que has comprendido que el ser humano establece relaciones por los valores que considera, y que el modo como él se percibe frente a los demás, la autoestima, repercute en sus relaciones humanas, te darás cuenta que no basta con saber que es lo que uno busca y valora, no basta con saber que es lo que uno busca y valora, no basta conocerse realmente como persona, se reclama después el saber comunicarlo a los demás y el saber recibir de los otros las cosas y apoyos que espera.
     La importancia de aprender a comunicar lo que uno pretende, cobra fuerza relevante pues alguien podría valorar las cosas adecuadas y estar muy seguro de sus principios pero si no es capaz de comunicar a los demás sus pretensiones de nada le serviría mentalmente tener grandes ideas.
     Tener empatía es tener posibilidades de expresión propia estableciendo contacto con los demás y esto se logra cuando la persona sabe que espera del otro, cual es su modo de comprensión de los problemas, donde están los sentimientos y emociones de los demás.
     Podríamos decir que la autoestima es el espejo de tu personalidad. Los psicólogos consideran patológico creerse peor de lo que uno es (pensando que siempre no se da una, que uno no es capaz de lograr objetivos, sintiéndose menos, torpe, perdedor, ignorante) o creerse superior de lo que uno es en realidad (esos que creen que todo lo pueden, que son los mejores, que nadie los merece, que no necesitan consejos de los demás porque ya saben todo, y mejor que cualquiera).
     La Autoestima, en cambio, es saber lo que uno es. es la madurez de poder verte reflejado en un espejo, conociendo tus habilidades, sabiendo de tus temores y fragilidades. Así, uno sabe que debe mejorar cuando y en que pedir ayuda; pero sabe también cuales son sus puntos fuertes, que es lo que puede aportar.
     La Autoestima permite la empatía con otros. La experiencia de saber como es cada uno le permite descubrirse distinto a los demás y lo hace ver a los demás y comprender en donde están parados, que sienten, como experimentan su sentirse débiles y la alegría y seguridad de sentirse aceptado gracias a algunas habilidades. 

     La empatía se refuerza gracias a la autoestima pues:
  • La experiencia de la propia fragilidad humana y de sus habilidades nos hace comprender que los demás experimentan lo mismo.
  • El autoconomiento psicológico y espiritual es la puerta del conocimiento de la psicología y espiritualidad ajena.
  • La empatia nos da valor como la tolerancia y el respeto de los demás pues lo sabemos distinto a nosotros pero con experiencias y habilidades validas de compartir

     En suma, fomentar la empatía es la puerta de la autorrealización compartida pues establece un puente entre las habilidades ajenas y la propia realización. Y ésta se entiende como la comprensión de las vivencias de los demás. Es la comprensión de la alteridad. La aptitud para recibir el mundo como si fuera propio sabiendo que es otro distinto de uno.
     Ese sentir como si estuviéramos adentro del otro, de traer a sí mismo al otro, comprendiéndolo. Se trata de un proceso de percepción esencialmente extraño a nosotros y que lo realizamos de manera imaginativa logrando identificarnos con la acción y emoción del otro sin confundir tal experiencia con nuestra propia realidad interior. La empatía es por esto una condición esencial de la relación interpersonal que nos permite mirar a través del marco referencial de la otra persona abriéndonos a la vida pacífica en sociedad.



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